México fracturado

La pasada elección federal deja muchas interrogantes sobre la gobernabilidad del país, hoy tenemos un mapa político complejo que divide a México en dos grandes bloques.

En la elección presidencial de acuerdo con datos oficiales del Instituto Federal Electoral (IFE), estados como Aguascalientes, Baja California, Coahuila, Colima, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Jalisco, Nuevo León, Puebla, Querétaro, San Luís Potosí, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Yucatán, fueron ganados por el partido Acción Nacional.

En cambio la coalición por el bien de todos (PRD-PT-Convergencia) gana Campeche, Chiapas, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Tlaxcala, Veracruz, Zacatecas, Baja California Sur, Nayarit, Hidalgo, Morelos, Estado de México y el Distrito Federal.

El próximo presidente de la republica tendrá que gobernar una sociedad donde las preferencias partidistas son parte primordial de la identidad de muchos mexicanos, de alguna manera esto refleja lo que siempre hemos tenido en el país, esta conformación de dos mexicos opuestos y distantes, el México de las oportunidades y el desarrollo (norte); y otro de las carencias y el atraso (sur).

Mapa político de México después del 2 Julio (elección presidencial).

Las tareas impostergables del siguiente mandatario son: la cicatrización de las heridas producto de la lucha electoral, la reconciliación de los actores políticos y la atención urgente de los reclamos de la población que no alcanzan a percibir un horizonte de bienestar.

El próximo gobierno tiene que evitar que las diferencias socioeconómicas agudicen los antagonismos políticos promoviendo una verdadera reconciliación nacional y sobre todo entregar buenas cuentas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y cono todos estos conflictos de que si ganó o no ganó Felipe, no podriamos mejor dividir el país, traernos a Felipe a gobernar los NSofM (Northern States of Mexico) y dejar al peje alla en el sur, a ver quien los mantiene?

Así todos felices y contentos, no?