Un sexenio para el olvido

Cuando Vicente Fox tomó posesión de su cargo como presidente de la República, asumió el "compromiso de promover siete reformas centrales" para "garantizar una democracia eficaz y una eficacia democrática", las expectativas eran enormes, las reformas en cuestión son las siguientes:

1. "La reforma que consolide el avance democrático, para que toda persona pueda hablar con libertad y ser escuchada." A este respecto, el resultado es una Ley Federal de Acceso a la Información, pero sigue pendiente una Ley Federal de Participación Ciudadana; así como la inclusión de asignatura de educación cívica en los programas de estudio.

2. "Una reforma que avance en el combate a la pobreza y en la igualdad social; para que ninguna madre carezca de dinero suficiente para comprar la leche de sus hijos. Actualmente, 50 millones de mexicanos viven en condiciones de pobreza y casi 20 millones en pobreza extrema; además, recientemente se aumentó el preció de la leche Liconsa.

3. "Una reforma educativa, que asegure la formación del mejor capital humano y para que ningún joven en nuestro país -así sea el de condición más humilde- se quede sin alcanzar su proyecto educativo por falta de recursos.

" Según, el Observatorio Ciudadano de la Educación, el Consejo Nacional de Participación Social en Educación debió reestructurarse desde 2002 en concordancia con lo establecido en el Programa Nacional de Educación 2001-2006 (PNE), sin embargo, esto no fue así, lo cual pone en duda, la eficacia e implementación de las propuestas del PNE.

Asimismo, a escala de las instituciones de posgrado e investigación se dio una continua disminución de presupuesto como la reducción de las becas al extranjero.

4. "Una reforma que garantice el crecimiento con estabilidad en la economía, para que nunca más nuestros jóvenes tengan que dejar su hogar y emigrar a otro país."

Las previsiones de crecimiento como ofertas de campaña bajaron del 7 por ciento al 4.5 por ciento al acto de toma de posesión de su cargo como presidente de la República; sin embargo, en términos reales, en 2001-2006 el PIB registrará la tasa de crecimiento promedio más baja (2.2% medio anual) de los cinco gobiernos anteriores.

De acuerdo con especialistas, en este mismo periodo estiman, una inflación media anual de 4.3 por ciento; tasas de interés de Cetes a 28 días de 8% promedio anual y tipo de cambio promedio sexenal de 10.5 pesos por dólar; el número de asegurados por el IMSS indica que la variación acumulada de puestos de trabajo fue de solamente 895 mil, mientras que en el periodo 1995-2000 resultó de 3.8 millones, y en cada uno de los dos sexenios anteriores rebasó el millón 200 mil.

Según el último Informe de Gobierno de Vicente Fox, "la migración internacional registró una pérdida neta de algo más de 582 mil individuos, lo cual significa alrededor del 39 por ciento del crecimiento natural de la población".

5. "Una reforma que descentralice facultades y recursos de la Federación para darles mayor vitalidad a los estados, los municipios y las comunidades." Esta pendiente la reforma del federalismo.

6. "Una reforma que asegure la transparencia y el rendimiento de cuentas en la tarea de Gobierno, para anular la corrupción y el engaño." De acuerdo el Índice de Percepción de Corrupción 2006, elaborado por Transparencia Internacional, México descendió cinco lugares al pasar de 65 al 70, al registrar 3.3 puntos, una décima menos que 2005 en una escala del 0 al 10.

7. "Una reforma que abata la inseguridad y cancele la impunidad, para que toda familia pueda dormir tranquila." La iniciativa de Seguridad del Poder Ejecutivo se encuentra en la "congeladora legislativa", mientras la inseguridad en todo el país creció radicalmente durante su sexenio.

Si a todo esto se le agregan todos los desatinos políticos, escándalos familiares y un estilo de gobierno disfuncional nos encontramos con un sexenio gris y para el olvido. Por ahora me quedo con la frase que dijo el hombre más sabio que paso por este mundo: “por sus frutos los conoceréis”.

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